De cero a diez mil

dorsal

Es muy curioso como pasan las cosas. Yo nunca he sido deportista, nunca me ha interesado el deporte más allá de lo que daban por televisión, y nunca fútbol, que es lo más emitido. Me tragaba cualquier cosa desde la comodidad de mi sofá, carreras de coches, de motos, natación, gimnasia, atletismo, tenis, baloncesto y desde luego nunca me había planteado traspasar la televisión y practicar nada de eso. Eso era para otros.

Bueno, en parte miento, si que me hubiera gustado estar en el sitio de esos deportistas que recibían medallas y lloraban a moco tendido con el himno de su país mientras su bandera era izada al viento. Ya lo del esfuerzo y el sudor lo veía como más lejos, yo al drama.

¿Quién me iba a decir a mí que acabaría saliendo por la tele mientras otros vagos veían mis avances? Pues la respuesta es muy sencilla, nadie. Y si alguien me lo hubiera dicho, habría pensado que no sabía de lo que estaba hablando, ¿deporte yo? #amosnojodas. Ahora me acuerdo de una frase que decía mi abuelo: «nunca digas de este agua no beberé ni este cura no es mi padre». Cuanta razón tenía el hombre. Hablaba poco, era muy para adentro, pero cuando lo hacía sentenciaba. Si levantara la cabeza, seguro que esbozaría una sonrisa con un ¿lo ves? escrito en los labios.

De cero…

Los que me seguís por Facebook y Twitter ya sabéis que acabo de participar en mi primera carrera, los diez kilómetros del EDP Rock ‘n’ roll Madrid Maratón y 1/2 y que he salido con vida, con agujetas y dolorido pero vivo, muy vivo. Y eso es porque soy un inconsciente que no piensa las cosas y se dedica a actuar por impulsos, hasta ahora me ha salido más o menos bien y por ello me atrevo a vivir de esa manera. Hace aproximadamente un año que me plantee correr, no lo había vuelto a hacer desde el instituto, donde era nombrarme el test de Cooper y ponerme de mala leche, le cogí mucha manía a eso de correr y la he arrastrado hasta hoy, así que si lo pienso, no se que coño hago haciendo lo que hago.

Lo dicho, me planteé correr para matar el tiempo, podría haberme planteado leer enciclopedias o tomar el sol pero pensé que sería mejor hacer un poco de ejercicio y coger un poco de forma física. Aún tengo dudas sobre como fue aquel momento, estaría enajenado o drogado. El caso es que lo intenté, con más o menos suerte y como aprovechaba para corretear mientras mis hijas estaban en el polideportivo, cuando se acabó su curso, se acabó el mío. No había conseguido prácticamente nada, un poco de fondo y poco más.

Acabado el verano, ya septiembre del año pasado, me regalaron un curso de iniciación al running que se desarrollaba durante ocho semanas, un día por semana en clase de grupo con un entrenador y la posibilidad de hacer algo de trabajo personal orientado entre semana. Las primeras clases eran sencillas, correr dos minutos (que se me hacían eternos), caminar uno (que duraba como diez segundos). Era el comienzo, escalado y ascendente para hacer las cosas bien. Ocho semanas más tarde corría aproximadamente veinte minutos seguidos para dar una vuelta completa a «El Retiro» y superar la prueba final del curso. Estaba tan contento con lo conseguido en esas semanas que me reenganché al grupo siguiente, y ya van ocho meses.

… a diez mil

Lo bueno que tienen esas clases grupales es que son divertidas, a mi sigue sin gustarme correr pero me lo paso bien, voy todos los domingos con mis «amiguetes», pasamos la mañana y hacemos deporte. Un día, a alguien se le ocurrió la idea de participar en una carrera oficial y venga, a apuntarnos como locos, como descerebrados, como histéricos….. La mitad del grupo se apuntó a la Carrera de los Bomberos y la otra mitad al Rock ‘n’ Roll y yo ahí, al lío.

Que locura, nunca había corrido esa distancia, lo más que había hecho eran cinco kilómetros, la mitad, y ya tenía bastante, pero la fecha de la carrera la veía tan lejana que daba por hecho que mi estado de forma de corredor de élite se iba a mejorar milagrosamente. Falso. Con el invierno llegó mi alergia al ciprés, las lluvias, el frío, la pereza de salir entre semana, el no estar a la altura en algunas clases, ¿frustración? un poco… y la fecha ya se iba acercando.

El último mes me he puesto las pilas y he atendido (en su mayoría) a la rutina de entrenos que me había puesto mi entrenadora para estar a tope de cara a la carrera, y se ha notado, dos semanas antes del evento corría seis kilómetros sin despeinarme, subidón. Una semana antes del evento hice una tirada de siete kilómetros y rebajando casi un minuto por vuelta…. pero nunca había corrido 10 kilómetros. Hasta ese día.

Y a pesar se la lluvia, del madrugón y del ataque de nervios que arrastraba desde una semana antes salí a correr y paso a paso hasta la meta, diez mil metros, mis primeros diez mil, acompañado de mi mujer, que también es una enajenada como yo y se metió de cabeza en esto del running, mas por casualidad que por convicción, pero que está hecha una fiera.

Esto último ha sido una aliciente especial, ir acompañado durante toda la carrera es motivador, de vez en cuando nos mirábamos y nos preguntábamos, otras corríamos por carriles opuestos de la calle y ella, en un despiste, o eso dice, se arrimó a otro que no era yo, creo que no llegó a hacerle ojitos, pero bueno, lo que pasa en la carrera, se queda en la carrera.

Otro aliciente, la gente, el gentío que poblábamos Madrid correteando como gacelas, gamos o bisontes, cada uno a lo suyo y a lo de los demás, constantemente animando y animándonos, había buen rollo y se notaba. En algunos puntos encontramos concentraciones de gente animando nuestro paso, se me ponen los pelos de punta solo de recordarlo. Aunque para pelos de punta, cuando a unos doscientos metros de la meta me llegaron los gritos que estaba dedicándome mi primo de Alemania, que ha venido por trabajo y que se pasó por la carrera a animar. Oir ese «PRIMOOOOOOO» me dio más energía que un litro de Red Bull y aceleré para entrar en la meta en pleno sprint, buscando a mi mujer con la mirada para no perderla y resulta que la cabrona me había adelantado y me sacó casi diez segundos. Chicas al poder.

Tercer aliciente, mi medalla, había una para cada uno pero yo ya había focalizado mi triunfo en ese pedazo de metal, y cuando me la pusieron por la cabeza me acordé de todos aquellos deportistas de élite de los que os he hablado al principio. Creo que no lloré por vergüenza y porque me hacía pis. A punto estuve de ducharme con la medalla y todo. Es un símbolo, una meta, otro objetivo cumplido.

Y ahora…

Hoy tenemos resaca de carrera y de ilusión, aún nos duran la emoción y las sensaciones y creo que se van a quedar con nosotros durante bastante tiempo. En principio seguiremos corriendo, entrenando con nuestros respectivos grupos y si surge, correremos más carreras. Intentaremos rebajar esos 1:04:33 que tenemos como marca oficial pero solo si se tercia, sin estrés, sin apuros, sin agobios.

Tengo la sensación de haber conseguido muchas cosas en estos ocho meses de entrenamiento, no es solo pasar de correr cero metros a correr diez mil. Ha sido un camino de superación, de implicación, de naturalidad, de objetivos, de empeño, de fuerza, de coraje, de alegría, de humildad, de motivación… son muchos momentos bonitos pero tampoco hay que mitificarlos. Si yo he podido, vosotros también. Ni mi mujer ni yo somos super-héroes, somo personas normales, más bien vaguetes, que se han propuesto una meta alcanzable y la han alcanzado.

Y hablando de metas, no quería despedirme sin recomendaros el blog de una compañera de running de mi mujer que ha relatado post a post toda su evolución hasta convertirse en medio-maratoniana. Cierra la boca y corre no tiene desperdicio, derrocha naturalidad y buen humor. Si alguien cree que lo que hemos hecho nosotros es espectacular, que lea alguna de sus entradas, yo estoy completamente rendido a Flor, a su mundo y a su fuerza de voluntad.

Que lo disfrutéis, y como siempre, si queréis que charlemos un poco, ahí tenéis los comentarios.

Hasta pronto,

J

20 respuestas a “De cero a diez mil

  1. Cuánto me alegra y motiva esta clase de testimonios…es aplaudible la manera en que aprovechaste el tiempo, lo has invertido en tu salud, estas cosechando otra perspectiva de la vida, de ti mismo de otros e inyectándolo a todo aquel que te escucha, muchas gracias por compartirlo, te cuento que yo también empecé a correr de 20 a 30 minutos al dia, pero no estoy todavía asi como convencida..jajajajaja no me gusta! siento que la cabeza me va a explotar, que me muero en cada vuelta y asi sucesivamente…jajajajaa pero leer esto definitivamente hace que me ponga los tenis y me lance de nuevo!!

    Le gusta a 1 persona

    1. Hola Flor, empezar poco a poco y con compañia es mucho mejor, prueba a correr y caminar e ir incrementando los ratos corriendo y verás como en poco tiempo puedes hacer mayores distancias con menos esfuerzo. Si te soy sincero a mí tampoco me gusta correr, pero me obligo a hacer ejercicio, que es muy sano. El otro día hablando con un amigo me decía lo mismo, no me gusta salir a correr me me encanta la sensación que tengo cuando acabo. No lo pienses, ponte las zapatillas y a correr. Ya me contarás.
      Un abrazo!!!

      Me gusta

      1. Hola Flor, ambos valores van de la mano pero cuando empiezas casi es más importante el tiempo invertido, tienes que hacer que tu corazón bombee y que tu cuerpo se acostumbre al esfuerzo, a medida que vayas ganando tiempo de trabajo podrás ir ganando resistencia y velocidad que son las que inciden en la distancia.
        Un abrazo!!!

        Me gusta

  2. Buenooooo que ahora me toca a mi llorar!!!! Jooooo qué emoción! Muchas gracias por tus palabras Juanan, no te imaginas la ilusión que me hace!!! Me ha encantado leerte, voy a empezar a utilizar lo del #amosnojodas me ha encantado xDDD

    Cómo que no somos superhéroes?? En una carrera que hicimos en Aranjuez, que eran 7,5k, una amiga y yo entramos en meta gritando «somos superhéeeeroeeeeeees!»
    Va, superhéroes lo mismo no, pero jo, quiero pensar que lo que hacemos es especial. Superarnos un poco más cada día, vencer al sofá que nos atrapa, escaquearle unos segundos al cronómetro en cada carrera…son pequeñas grandes cosas.
    Con lo de «PRIMOOOOOO» te pasó como a mi con mi hermano, que me dio alas a escasos 200-300 metros de la meta. Qué subidón eh?
    Y la medalla…ay! Yo tampoco me la quería quitar! Ayer la llevé en el bolso todo el día! Con lo que pesa!

    Nuestro próximo diez mil, (D.M.) es la Carrera Liberty, el 31 de mayo, tienes un mes para entrenar y bajar la marca 😉

    ENHORABUENA por la carrera, por esta entrada tan emotiva, por muchos kilómetros más! Un besote muy gordo!

    Le gusta a 1 persona

    1. Hola Flor, que curioso… dos flores en el mismo post, jajajajaja.
      En parte es eso a lo que me refería, al hecho de que con un poco de preparación y de fuerza de voluntad se consiguen resultados, solo hay que proponérselo y ser constante.
      Alguna carrera más caerá, no te lo voy a negar, esta mañana he estado echando un vistazo a la Liberty y a lo mejor me animo pero tampoco quiero obsesionarme, si no es esa será otra y seguro que esta vez si que coincidimos, 😉
      Ahora de momento tengo que ver mi agenda y la de las niñas, que tienen una vida social que ni Paris Hilton….

      Un abrazo!!!!

      Me gusta

  3. Oleee!, Que bonito, me ha encantado, en serio. Adoro que cosas tan sencillas y humildes como correr puedan dar y ofrecer tanta alegría, felicidad y crecimiento personal. Es fantástico.

    Te dije el otro día que me dabais envidia sana, y es q a mi si que me gusta correr.
    Cuando era más jovencita y delgada, a veces por aburrimiento salía con mi hermano (y antes ni siquiera teníamos walkman) y mientras sincronizaba pasos, con respiraciones, y pensamientos, entraba en una especie de meditación o viaje interior que me hacía sentir bien. Por eso me encantaría poder hacerlo ahora.

    Siempre he sido culo de mal asiento, pero en algun momento empece a coger peso y alejarme de toda actividad deportiva, así que ahora con los críos y a mi que me gusta jugar, cuando me pongo al futbito y le pego dos o tres pases al niño y me asfixio, me da el coraje padre…

    Tengo decidido que ya al igual que otras cosas no puedo dejar pasar más tiempo, y que de este verano no pasa que empecemos a correr…el niño, la niña, y yo.

    Leyendote ya me has picado y voy a empezar subiendo y bajando las escaleras del bloque (9 plantas) hasta el verano, con mis dos «satélites» así nos desestresamos de paso, y voy cogiendo un poquito de fondo.

    Ves como ya llega primero de mes, hacemos propósito de enmienda jajaja a ver si llegamos al día 3…

    Un abrazo y FELICIDADES!!! Poned la medalla bien visible que tiene mucho mérito.

    Ah y por cierto mi abuela decía:…» nunca digas de este agua no he de beber, porque yo la bebía clara y bebiendo la enturbié»

    Le gusta a 1 persona

    1. Hola Marisol, muchas gracias por tus palabras. No tienes que tenernos envidia… si supieras lo que nos duele todo ahora, jajajajaja. Pero entiendo lo que dices, si que es un subidón hacer este tipo de aventuras, programarte, prepararte y conseguir superar una meta sencilla, aún cuando lo recuerdo se me ponen los pelos de punta, que de sensaciones buenas!
      Si quieres correr, hazlo, échale un vistazo al blog que he enlazado que te va a servir mucho, Flor es un ejemplo de superación y paso a paso va avanzando, en seis meses de entreno ha pasado de nada a correr media maratón, seguro que encuentras mil trucos para empezar con buen pié y mil consejos que te pueden servir.
      Yo por mi parte te animo y si necesitas una liebre, me apunto. 🙂
      Un abrazo!!!

      Le gusta a 1 persona

  4. Que orgulloso estoy de vosotros!!.
    A ti ya te han felicitado por doquier a lo que yo me uno con total entrega y entusiasmo.
    Desde este mismo instante me declaro presidente del club de fans de la Sra.de lucas, viva la madre q la pario,empezo con el «tiqui tiqui ti» y pasito a pasito 10.000 m. Casi na!!
    Sois cojonudos y muy muy grandes.
    Mis respetos a tu Sra.
    (Perdonala lo de los ojitos a otro)
    10.000 veces grande?
    Mi juan!!!

    Le gusta a 1 persona

    1. Hola Mipe, tienes a la parienta emocionada, jajajaja. Anda que no nos hemos reído del tiqui, tiqui con los tacones y saltando charcos y mírala ahora, hecha una atleta.
      Si solo hay que proponerse las cosas para empezar a conseguir resultados…
      Ya si nos gustar correr… sería la leche!!!
      Un abrazo!!!!

      Me gusta

  5. ¡Enhorabuena Juanan! Yo no soy muy deportista, pero por amigos que tengo veo el calado que está consiguiendo el running y me alegra muchísimo. Un deporte sano, al aire libre, en el que cada cual decide si solo o acompañado, su ritmo y su meta… Tienes mucho mérito, en menos de un año has avanzado muchísimo. Ahora… ¡A por la siguiente meta!

    ¡Un saludo Juanan!

    Le gusta a 1 persona

    1. Hola Patri, es justo eso, libre de elecciones y saludable.
      Estoy encantado con tantas muestras de ánimo y cariño, me siento como un ganador solo por haber corrido esta carrera, imagino que será por ser la primera, en mi ciudad y muy bien acompañado, jajaja.
      Un abrazo!!!

      Me gusta

    1. Hola Carol, muchas gracias por los ánimos!!!
      Estamos encantado, no te lo voy a negar, hemos hecho algo que no nos habíamos planteado meses atrás y hemos salido victoriosos, en un pequeño triunfo pero que nos ayuda en el día a día.
      Lo de la San Silvestre ya lo iremos viendo… hace mucho frío y es en un día muy malo… pero no digo que no,
      Un abrazo!!!

      Le gusta a 1 persona

Deja un comentario